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Aislamiento térmico
En la experiencia “Conducción del calor” puedes verificar que los distintos materiales son mejores o peores conductores del calor.
Un material mal conductor del calor es un buen aislante.
Para lograr mayor confort en una edificación y ser eficientes en el uso de la energía el aislamiento térmico cumple dos funciones muy importantes:
- Aislar el pasaje de calor en las paredes, los techos y las aberturas: en invierno del interior hacia el exterior y en verano al revés.
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Conservar la temperatura interior.
Si, por ejemplo, has templado el ambiente interior de tu casa con una estufa o un aire acondicionado, los materiales aislantes evitan que ese calor salga rápidamente hacia afuera cuando apagues el aparato.
Capas de aire quieto, madera, poliestireno (espumaplast), poliuretano, son materiales aislantes muy utilizados.
¿Y el vidrio?
Las ventanas nos proporcionan confort por el pasaje de la luz natural y por la posibilidad de vista al exterior.El inconveniente es que el vidrio es un buen conductor del calor y por tanto un mal aislante. Las aberturas de vidrio suelen aislarse con la colocación de vidrios dobles (que tienen una capa de aire entre cada lámina de vidrio), con protección exterior (por ejemplo, postigos, cortinas de enrollar) o por dentro con cortinas de diversos materiales.